Huevos de Codorniz, cada vez más presentes en la cocina.

huevos de codorniz

¡Y no nos extraña! Porque añadir huevos de codorniz a tus platos puede hacerlos más sofisticados, porque dan un toque original a su presentación, harán tus creaciones culinarias más atractivas para los más pequeños de la casa, pero también porque añadir huevos de codorniz en tus recetas enriquece su valor nutricional.

Valores nutricionales de los huevos de codorniz

Como decimos, los huevos de codorniz destacan por su alto contenido en proteínas y la poca presencia de carbohidratos.

Es decir, suponen un gran aporte energético, incluso mayor al de los huevos de gallina a pesar de su evidente diferencia de tamaño. En 100 gramos de este alimento podemos encontrar:

  • Calorías: 155 kcal
  • Hidratos de carbono: 0,41 gr
  • Grasas: 11,2 gr
  • Proteínas: 13,05 gr
  • Colesterol: 844 mg
  • Calcio: 64 mg
  • Fósforo: 226 mg
  • Potasio: 132 mg

Pero, además de todo esto, los huevos de codorniz también contienen vitaminas A y B, colina, hierro, yodo y magnesio.

Propiedades y beneficios

A pesar de su pequeño tamaño (un huevo de codorniz puede pesar entre 10 y 15 gramos; es, por tanto, 3 o 4  veces más pequeño que un huevo de gallina, pero las propiedades de los huevos de codorniz superan a las de los huevos de gallina.

  • Proteinas: Contienen un 13% frente al 11% de los huevos de gallina
  • vitamina B1: Los superan ampliamente conteniendo140% de la frente al 50% de los huevos de gallina
  • Proporcionan cinco veces más hierro y potasio.

Otra de las ventajas de los huevos de codorniz en nuestra alimentación es que, a diferencia de los huevos de gallina, no son conocidos como causantes de alergias o enfermedades.

El consumo de estos huevos es muy recomendado en la alimentación de niños y personas mayores por su elevado contenido en fósforo y calcio, fundamentales para el crecimiento y mantenimiento de los huesos y dientes.

También por el importante aporte de proteínas, que hacen que su digestión sea fácil y contribuyen al crecimiento. Como hemos mencionado más arriba, los huevos de codorniz aportan vitaminas muy necesarias para nuestro organismo y su proteína ovomucoide refuerza el sistema inmunológico.

La vitamina A, por ejemplo, contribuye a la formación de tejidos blandos y al mantenimiento de la piel. Por su parte, la vitamina B nos ayuda a mantener el sistema nervioso y favorece la formación de glóbulos rojos en la sangre.

Son una buena fuente de hierro, por lo que su consumo está indicado en personas con anemia. Y aunque el nivel de colesterol contenido en los huevos de codorniz es alto, los estudios evidencian que éste no eleva el colesterol en la sangre.

Son las grasas saturadas de los alimentos y no el colesterol, las peligrosas para nuestra salud, y el huevo tiene pocas grasas saturadas. Sí encontramos, entre las grasas que contiene el huevo, la colina, que es una aliada para prevenir las enfermedades de corazón, las piedras en la vesícula y para mantener la memoria. Estamos, por tanto, ante un alimento muy completo.

Preparación de huevos de codorniz

Al igual que los huevos de gallina, los huevos de codorniz se pueden freír, cocer o hacer a la plancha.

Aquí vamos a dar algunos consejos para saber cómo debemos cocer estos mini huevos para obtener un bocado delicioso.

  • Hervir: Una vez rompe a hervir el agua, los huevos de codorniz necesitan entre 4 y 5 minutos para cocinarse. Aunque puede que prefieras que la yema de tus huevos no quede tan dura, entonces solo necesitas dejarlos cocer entre 2 y 3 minutos.
  • Enfriar: Una vez cocidos, debes sacar los huevos del agua hirviendo y ponerlos en un cazo con agua fría o enfriarlos bajo el grifo. De este modo puedes parar el proceso de cocción de una manera más rápida. Además, este cambio brusco de temperatura te facilitará que peles los huevos duros: una vez fríos, la clara del huevo se separará más fácilmente de la cáscara.
  • Pelar: Para pelar los pequeños huevos de codorniz sin que se rompan es, después de haberlos enfriado bien, es hacerlos rodar presionando suavemente con la palma de la mano, también si son muchos, ponerlos en una olla con tapa y sacudirlos, de esa forma la cáscara se trisará toda, facilitando la pelada.

Ahora que conoces todas las propiedades y beneficios de los huevos de codorniz y lo fácil y rápido que es prepararlos, puedes convertirlos en uno de tus productos estrella de tu cocina.

Consejos para unos huevos de codorniz de rechupete

Inclúyelos en las ensaladas, como guarnición de tus guisos, de un arroz, en canapés y tostadass.

No dejarás a nadie indiferente, darás un toque divertido y sofisticado a tus platos y, lo más importante, aportarás muchas proteínas, vitaminas y nutrientes a las comidas.

Son el aliado perfecto, por ejemplo, en la dieta de nuestros pequeños, que podrán comer huevos hechos a su medida pero con más propiedades beneficiosas de lo que imaginan y, además, de una manera más divertida.

Colaboración: Granja Atuel – datos de contacto para conseguirlos Aquí

Fuente: Alfonso López recetasderechupete.com

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