SUICIDIO

Suicidio

Hablar de suicidio puede ser difícil, a veces un tema tabú. Sin embargo hay que tener en cuenta que sólo se le teme a lo desconocido y lo más importante: EL SUICIDIO ES PREVENIBLE.

¿Qué es el suicidio y a qué responde?

Es el acto por el cual una persona se provoca la muerte de forma intencional. Por lo general es consecuencia de un sufrimiento psíquico y desesperación atribuibles a circunstancias vitales como dificultades financieras, problemas en las relaciones interpersonales, soledad o acoso psicológico.

  • Enfermedades psiquiátricas: depresión severa, trastorno bipolar, esquizofrenia, etc.
  • Abuso de sustancias: alcohol, drogas.

El factor de riesgo individual más importante es el antecedente de intentos previos por lo que no se debe minimizar o restarle importancia a las amenazas o gestos suicidas anteriores.

Es la novena causa de muerte a nivel mundial y la segunda entre los jóvenes. El riesgo aumenta con la edad, siendo los dos grupos etarios más vulnerables, niños y adolescentes (entre 10 y 20 años) y ancianos. El varón consuma el suicidio 3 a 4 veces más que la mujer y la mujer intenta 3 a 4 veces más que el varón.

Existen los llamados factores protectores:

  1. Religión: estadísticamente se ven tasas de suicidios más altas en el ateísmo, el factor protector estaría relacionado con el sentido de la vida, la creencia de una vida después de la muerte.
  2. Familia: las tasas más altas se ven en los viudos, personas sin hijos, solas.
  3. Grupos sociales: amigos, grupos de jóvenes, centros de jubilados.

Existen mitos acerca del suicidio, sobre todo «hablar de suicidio, da la idea de hacerlo». Esto no es así ya que las emociones van y vienen, no son permanentes y pedir ayuda alivia el sufrimiento mental, alivia la angustia, la ansiedad y es una oportunidad para pedir ayuda.

Es muy importante PREGUNTAR, ESCUCHAR, ACOMPAÑAR Y PEDIR AYUDA y sobre todo EL SUICIDIO ES PREVENIBLE.

Colaboración de: ALICIA FRITES MÉDICO PSIQUIATRA

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