Agresión en Perros

Perro agresivo

La agresión en perros conducta es la más frecuente de las alteraciones del comportamiento de los caninos domésticos.

Se debe tener en cuenta que la mayoría de las conductas agresivas son para la especie canina patrones normales de comportamiento, lo cual hace más difícil la resolución de problema.

Hay diferentes tipos de conductas agresivas:

Agresión Predatoria:

Es la agresión dirigida a lo que el perro toma como una presa. El ejemplo típico sería los animales que persiguen un ciclista o a personas que corren

Agresión entre machos

Es muy frecuente en las casas donde conviven dos o más perros machos. Esta conducta es influenciada por la hormona masculina (testosterona). Una posibilidad de tratamiento es la castración de los perros involucrados, o la aplicación de hormonas femeninas a los perros, pero cuando se deja de utilizar comienza nuevamente el problema.

Agresión entre hembras

Es una alteración difícil de resolver, no es influenciada por la hormona femenina, sino por el no establecimiento del orden jerárquico entre las perras que conviven juntas. Se necesita que el propietario tenga un gran dominio sobre las perras que se agreden, para inhibir el deseo de confrontación. Está indicado separarlas cuando no puede haber un control por parte del propietario.

Agresión por miedo 

Se presenta en animales inseguros y de poco carácter  que al querer ser tocados por alguien y no tener la posibilidad de escapar, se sienten acorralados y muerden. Son animales que no se los debe tratar con brusquedad.

Agresión por dolor

Es una conducta que tiene una función protectora para el animal, ya que es un mecanismo de defensa, no obstante es inaceptable que un animal muerda a su dueño cuando le está haciendo una curación. La forma de evitar este comportamiento es habituar desde pequeño al animal a inhibirse ante pequeños dolores que le produzca el dueño al curarlo.

Agresión Territorial

Es una conducta normal en el perro y en muchos casos buscada por los propietarios cuando desean que sus perros sean guardianes de su propiedad, pero muchas veces el animal se excede en esta conducta y resulta un problema el caso de los animales que intentan agredir a las visitas. La educación del perro a edad temprana es la mejor solución para evitar esta situación, no se le debe fomentar excesivamente esta conducta pues el animal, la va a presentar, pero cuando le es fomentado se torna más agresivo e in dominable.

Agresión Maternal

Es la agresión desarrollada por las perras con crías de pocos días de vida, hacia otros animales o hacia las personas, es influenciada por las hormonas y depende de la relación que tenga el animal con sus dueños para que desarrolle esta conducta con los mismos y más aún con extraños. Se debe tomar la precaución los días previos y posteriores al parto , mantener a la perra en un lugar seguro evitando la presencia de animales personas extrañas que puedan influir en el desarrollo normal de la parición y en su cambio de carácter. Generalmente  al mes de haber parido esta conducta  desaparece.

Agresión por alteración fisiopatológicas

Este comportamiento se debe a desórdenes neurológicos tanto físicos como químicos. También algunas enfermedades hormonales son causantes de comportamientos agresivos de un animal como por ejemplo el hipotiroidismo. Estos problemas son de resolución estrictamente médica.

Agresión Dominante

Generalmente se observa en machos sin castrar, mayores de un año y medio de edad, habiendo una incidencia racial muy marcada ya que muchas veces en los cruzamientos se le da importancia a la estética y no se tiene en cuenta el carácter del perro y de esta manera se obtienen crías de padres altamente agresivos, y con un alto grado de probabilidades que sus hijos también lo sean. El perro que es agresivo por dominancia puede serlo con todos o con algunos integrantes de la casa. Por lo común son animales muy amigables con extraños.

Los signos de dominancia que el perro realiza para con su dueño antes de llegar a morder son varios por ejemplo: Colocar su cabeza presionando las rodillas de la persona, mirarlo fijamente a los ojos y no desviar la mirada, permanecer en  el paso frente al propietario y no moverse del lugar.

Si el dueño fue permitiendo todas estas situaciones ya sea por temor o por desconocimiento, el animal comienza a creer que es dominante sobre su dueño o sea que éste es su subordinado y por consiguiente debe reprenderlo cuando no cumple con las reglas caninas de subordinación. Este es el inicio de la agresión dominante.

El objetivo del tratamiento conductal es evitar lesiones en la gente e invertir el orden jerárquico en la mente del perro.

La modificación de esta conducta es muy complejo y lleva bastante tiempo y paciencia del dueño, siempre está contraindicado el castigo pues desencadena una reacción más agresiva del perro. Para modificar esta conducta se puede realizar lo siguiente: Retiro de afecto y de atención social cuando el perro muestra algún signo de agresividad, enseñarles ejercicios de adiestramiento como sentarse y recompensarlo cuando lo hace bien, sacarlo a caminar bastante tiempo para que gaste energía.

En el caso de los machos está también indicada la castración quirúrgica.

Colaboración de: Dr. Carlos Blanche, Médico Veterinario

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